"Palo y palo", "recambio continuo", "doble turno mediodía y noche", fueron algunos de los calificativos utilizados en distintos establecimientos gastronómicos, consultados por LA CAPITAL ayer al mediodía, para graficar lo sucedido en el sector durante la primera parte del fin de semana largo.
La gastronomía de Mar del Plata es uno de los ítems resaltados a la hora de valorar las cualidades que ofrece la ciudad y, durante el fin de semana largo que culmina hoy, se registró un “importante movimiento” en los distintos restaurantes y bares de la ciudad.
“Hay gente, por ende hay trabajo. Después, decir si la facturación fue buena o mala es otro tema, pero gente hubo”, analizó un operador turístico que consideró como “positivo” el resultado a nivel turístico del fin de semana largo amparándose en las cifras de arribos (ver no a parte).
El centro comercial del Puerto es un clásico, a la hora de comer, para quienes visitan la ciudad. Y ayer al mediodía, con las nubes ganando espacio en el cielo, el estacionamiento se mostraba casi completo.
En consonancia, en Chichilo describieron como “muy bueno” el movimiento registrado durante todo el sábado y parte del domingo. “Hubo mucha gente, trabajamos muy bien tanto ayer (por el sábado) como lo que va de hoy”, resumieron Débora y Melina desde detrás de la caja.
Como en los demás rubros, las promociones y descuentos son parte del menú donde reina como plato principal las rabas. “Con distintas tarjetas tenemos descuentos que van del 15 al 20 por ciento”, explicaron las mujeres que consideraron a “las rabas” como la elección preferida de los comensales.
“Tenemos de todo, para todos los paladares, pero las rabas no fallan. Siempre están en la mayoría de las mesas”, opinaron a la vez que calcularon que una familia tipo puedo comer “bien, con postre y bebida, por entre $500 y $600, porque tenemos platos que son para compartir y nuestras porciones son bien generosas”.
“Se trabajó muy bien, ayer (por el sábado) fue palo y palo y hoy pinta parecido”, analizó Nahuel el comportamiento en Santa Rita, en ambos turnos. Si bien en el local ofrecen un menú de $180 en efectivo, con ensalada marina, chupin de abadejo, postre y gaseosa, durante el fin de semana largo se trabajó “más a la carta” con consumiciones que rondaron “entre los $200 y $250, dependiendo de la bebida y las elecciones”.
Al sol
Con promociones del “estilo picada”, con rabas, cornalitos, calamares, más bebida, a razón de $170 por persona, en Mediterráneo no dudaron en calificar a la asistencia de público como “muy buena. El sábado fue parejo, con dobles turnos, tanto al mediodía como a la noche”, resumió Leonela.
“También anduvieron muy bien, siempre llenas, las mesas del exterior el sábado al mediodía y la tarde”, añadió Agustina y recordó que en el establecimiento cuentan “con patio para los más chicos y animación”.
Un clásico que se reitera, con sol o lluvia, es la cola que se forma -en determinados horarios- para conseguir en alguna de las sucursales de Manolo. En el local de Castelli y la costa aseguraron que “el fin de semana largo viene bien, en todos los horarios”.
La espera con forma de cola también se corporizó en el eslabón de Santa Fe entre Rivadavia y San Martín de Montecatini, dónde se trabajó “casi al 100 por ciento, siempre tuvimos cola para entrar, tanto al mediodía como a la noche”, señalaron.
“Tuvimos mucha gente, con mucho recambio y doble turno tanto al mediodía como a la noche y la perspectiva al menos para hoy es similar”, reseñaron en el local que ofrece menús especiales de pasta desde $150 aunque el plato que más sale es “la milanesa, napolitana o completa, que viene con huevo y papas fritas”.
Variedad
Las parrillas también tuvieron buena asistencia de público, en cualquier punto geográfico donde se ubiquen. En las adyacencias de Güemes, en Olavarría casi Avellaneda, Mandinga tuvo una asistencia que “osciló entre el 90 y 100%, dependiendo del horario. Se notó el fin de semana largo y trabajamos bien”, opinó Lucía.
Si bien en la parrilla ofrecen menús desde $150, durante las minivacaciones trabajaron básicamente “a la carta” con especialidades como “la entraña y el vacío”, cuya cuenta con el acompañamiento y la bebida rondó “los $250 por persona”.
“Estamos trabajando bien, hoy (por ayer) arranca un poco más tarde porque la gente no madruga, pero ayer hicimos doble turno casi completos tanto al mediodía como a la noche”, detalló Luis, encargado de “El Brasero”.
El tradicional tenedor libre, que está ubicado en Rivadavia y Entre Ríos desde 1978, ofrece una amplia carta que contempla “fiambres, ensaladas, todo tipo de cortes de carne a la parrilla por $140 por persona más bebida” y recordó que “nosotros no cobramos cubierto”.
Aunque en ambas sucursales de “Los Toldos Viejos” cuentan con “una clientela estable, por suerte”, durante el fin de semana largo que termina hoy tuvieron “una demanda continua, tanto al mediodía como a la noche” y hasta tuvieron que cerrar la lista de reservas. “Se notó mucho movimiento, trabajamos muy bien”, describieron.
Iguales sensaciones tuvieron en Tiziano, el tradicional restaurante especializado en pastas ubicado en las inmediaciones de Güemes. “Si bien tenemos a nuestros clientes estables, digamos, hubo mucha demanda lo que nos generó esperas más largas que lo habitual”, señalaron en el local que el sábado a la noche recibió la visita de la gobernadora María Eugenia Vidal y su familia.
Claro que, a media tarde o para arrancar el día, las cafeterías ofrecen otras opciones alimenticias. “Trabajamos bien en todos los horarios, hubo mucho recambio a la tarde, porque nuestra especialidad es la pastelería. También tuvimos buen movimiento con los almuerzos”, describieron en la sucursal de Formosa y Alem de La Fonte D’Oro.